viernes, 21 de septiembre de 2018

Mito griego de Andrómeda


Andrómeda fue una virgen de extraordinaria belleza que estuvo a punto de ser sacrificada y devorada por un monstruo. Por fortuna, Perseo se enamoró de ella y la salvó.
Según el mito de Andrómeda, la esposa del Rey Cefeo, llamada Casíope, se jactó de ser más bella que las nereidas y provocó la furia de Poseidón. Como castigo, el dios de los mares inundó la tierra con las bravas aguas marinas. Por esta razón, el rey Cefeo consultó al oráculo y obtuvo la instrucción de sacrificar a su hija. De esta forma, la joven Andrómeda, mujer de belleza casi divina, fue encadenada en un acantilado. El destino de la doncella era ser devorada por un monstruo marino, enviado de Poseidón.
Perseo se enamora de Andrómeda
Aquel día, Perseo continuaba su mítico viaje cuando vio a la joven doncella encadenada, de acuerdo al mito de Andrómeda. Desde las alturas, el hijo de Zeus creyó que se trataba una estatua de no ser por las lágrimas que vertía. A causa de su insólita belleza, el héroe sintió ardientes deseos en su corazón. Al encontrarla atrapada por la cadena, le preguntó su nombre y el por qué estaba ahí. Después de obtener las respuestas, los padres de la virgen aparecieron en el lugar. Perseo se presentó y propuso salvar a la princesa, a cambio de obtenerla en matrimonio. Tanto Cefeo y Casíope aceptaron.
Más adelante en el mito de Andrómeda, Perseo entra en combate contra el monstruo marino. La criatura era gigantesca y brutal, pero el héroe pudo esquivarla con ayuda de sus sandalias aladas. Cuando estuvo en las alturas, pudo blandir su curveada espalda en el lomo del animal. La criatura se revolcaba y manchaba las olas con sangre. Gracias a estas certeras heridas, Perseo salió airoso y pudo liberar a Andrómeda. Cumplieron su palabra los reyes y aceptaron el matrimonio. Junto con Perseo, Andrómeda tuvo siete hijos. A su muerte, la diosa Atenea la colocó entre las estrellas del cielo: la constelación de Andrómeda.
Fuente: https://www.mitos-cortos.com/mitos-griegos/mito-griego-de-andromeda/

Las Nereidas, ninfas del Mediterráneo


Las Nereidas pertenecen a la mitología griega, son las 50 ninfas de incuestionable belleza que habitaban el mar Mediterráneo. Hijas de Nereo, el viejo hombre del mar y de Doris su esposa una oceanide. Cada una representa las formas en que era visto el mar Mediterráneo, Talía era una nereida color verde esmeralda y Galatea blanca como la leche, aludiendo a la espuma del mar, por otro lado Dinamenea representa el ir y venir de las olas y Cimodaré la mar en calma.
De todas ellas las que más se destacaban eran Tetis, madre de AquilesAnfitrite la más bella de todas, esposa del dios del mar Poseidón y madre de los tritones; por último está Galatea quien se había enamorado del monstruoso cíclope Polifemo.
Sobre Tetis vale hacer una aclaración interesante, ella fue la ninfa más codiciada por el dios Zeus pero nunca tuvo el coraje para seducirla ya que las profecías aseguraban que un hijo de Tetis sería aún más poderoso que su padre.
Zeus entonces, por temor decidió unirla a un mortal, el rey Peleo. Ordenó al centauro Quirón que organizara un encuentro entre ambos de tal forma que la ninfa nunca se enterase porque rechazaría al hombre. Este fue escondido cerca de la cueva donde solía estar Tetis a la espera de que se quedase dormida y una vez sumida en los brazos de Morfeo el mortal entró para poseerla.
Al verse atacada Tetis se resistió con fuerzas pero la insistencia del rey pudo más y ella finalmente optó por entregarse por completo a sus deseos, ambos culminaron casándose y de su unión nació el poderoso Aquiles.
Las Nereidas viven en las profundidades del mar  junto a sus padres y sólo acceden a la superficie para jugar con las olas, observar a los navegantes y en caso de que se las necesite, prestar ayuda, generalmente marineros en apuros, a los cuales socorren montadas en delfines u otros animales del mar.  Por esta razón el pueblo griego les otorgaba ofrendas desde las orillas del Mediterráneo, eran altares en los cuales colocaban leche, aceites y miel.
Eran la representación de la belleza marina, según la mitología estas ninfas tienen una voz muy melodiosa, increíble y cuando cantan bailaban alrededor de su padre. Ellas forman parte del séquito de Poseidón por lo cual en algunas representaciones se las ve con un tridente en la mano y con la cabeza adornada con ramas coralinas. Con el paso de los siglos se las consideró como elementales, seres energéticos vinculados estrechamente con uno de los 4 elementos, en este caso agua.
Las nereidas nacieron antes de que los mortales pobláramos la tierra y aún antes de que muchos de los dioses griegos fueran creados. Se las suele recrear como mitad mujeres y mitad pez, o bien como bellísimas jóvenes de figura humana con largos y sedosos cabellos rubios adornados con los frutos del mar y sentadas sobre animales marinos como los delfines.
La propia imagen de estas deidades, al igual que otras ninfas de los mares, era la representación de la inconmensurable belleza femenina, su poder seducción y en cierto modo la encarnación de la mujer ideal e inalcanzable.
Fuente: https://universomarino.com/2009/04/05/las-nereidas-ninfas-del-mediterraneo/