sábado, 7 de noviembre de 2015

Embolia: tratamiento, causas, síntomas, diagnóstico y prevención



Es la obstrucción de un vaso sanguíneo por un coágulo, burbuja, grasa u otra sustancia, que detiene la circulación en el territorio irrigado por ese vaso.
El sistema circulatorio del organismo humano es como una enorme red de supercarreteras, carreteras y carreteritas. De importancia vital es que la sangre circule continuamente por todo el cuerpo para poder transportar el oxígeno y otras sustancias a las células y órganos. Pero, al igual que sucede con los accidentes de carretera, los accidentes vasculares pueden obstruir la circulación en el ser humano.

¿Qué es, concretamente, una embolia?

Es la obstrucción de una arteria corporal que disminuye e incluso puede interrumpir totalmente el paso de la sangre a la zona irrigada por dicha arteria. Son muchas las sustancias potencialmente obstructoras. Por lo general, se llama émbolo a un cuerpo circulante pequeño desprendido de otra parte del organismo y que ha sido arrastrado por la corriente sanguínea hasta atascarse en un vaso de diámetro insuficiente para dejarlo pasar libremente.
Los émbolos son peligrosos. Pueden ocasionar la muerte si obstruyen una arteria grande, como la pulmonar (que pasa por los pulmones).
Y pueden también producir la muerte de un determinado tejido si interrumpe la circulación a la zona afectada. Los émbolos se conocen a veces por “accidentes en espera de que sucedan.”

¿Cómo se producen los émbolos?

Los émbolos más comunes son los originados por coagulación de la sangre en una arteria o una vena. Si este proceso, conocido por trombosis, ocurre en las venas, siempre existe la posibilidad de que el coágulo (o trombo) se desprenda y sea transportado por la sangre a la arteria pulmonar. Esta es la arteria que lleva la sangre del lado derecho del corazón a los pulmones, en los cuales la sangre circulante cede su dióxido de carbono y se recarga de oxígeno. Cuando un coágulo sanguíneo obstruye la arteria pulmonar, la sangre no se oxigena. Esto da lugar a un cuadro clínico de urgencia, con síntomas parecidos a los de un ataque al corazón (o infarto de miocardio).
Hay otras sustancias que pueden también originar embolias, como por ejemplo:
– Burbujas. Se forman en los buzos sumergidos en aguas marinas cuando ascienden muy rápidamente hacia la superficie, puesto que el nitrógeno comprimido de sus tejidos grasos (adiposos) se libera y pasa a la sangre en forma de burbujas. Esta afección se denomina “mal de los buzos.” También pueden formarse burbujas de aire durante la inyección de líquidos o medicamentos en las venas o arterias, siendo ésta una de las razones por las cuales los médicos y las enfermeras expulsan por presión el aire de las agujas antes de introducirlas en los vasos sanguíneos de los pacientes.
– Tumores. Conforme crecen, los tumores (benignos o malignos) pueden obstruir, por compresión, un vaso sanguíneo; análogamente, un fragmento del tumor puede desprenderse y quedar atrapado en un vaso sanguíneo de otra parte del cuerpo. En ambos casos, se obstruirá la circulación en el vaso de que se trate.
– Grasas. Los tejidos grasos son susceptibles de desprenderse de cualquier parte del cuerpo. Por ejemplo, cuando se produce una lesión grave en, digamos, el hígado, es muy posible que se desprenda un fragmento de tejido praso que sea transportado a otro lugar por el torrente sanguíneo.
– Fragmentos óseos. Una astilla producida al romperse un hueso del brazo o de la pierna puede también obstruir una arteria.
La embolia se da en cualquier parte del cuerpo, pero con mayor frecuencia en la arteria pulmonar. Esto se debe a que la sangre que vuelve al corazón tras haber recorrido todo el cuerpo pasa primero por esa arteria.

Signos y síntomas

Los síntomas de la embolia pulmonar incluyen el dolor de pecho, que se intensifica si la persona afectada respira profundamente; falta de aliento; tos, que a veces obliga a expectorar sangre de los pulmones; mareos, angustia, sudores; respiración acelerada y taquicardia (latidos rápidos).
Estos síntomas son similares a los de un ataque al corazón, y algunos se parecen a los de un ataque de ansiedad. Pero se dan también casos en que la embolia es clínicamente muda (no manifiesta ningún síntoma).

Diagnóstico y tratamiento

Las embolias son a veces difíciles de diagnosticar. El médico puede encargar una radiografía, una tomografía computada, o una gammagrafía de los pulmones, para ver si hay alguna embolia. A veces se le inyecta al paciente un colorante que permite distinguir mejor la embolia con la radiografía normal o la tomografía computada.
La embolia pulmonar afecta anualmente a 500.000 estadounidenses, de los cuales el 10 por ciento mueren dentro de la primera hora del accidente vascular. Con el tratamiento, muchos de los afectados se salvan y llevan vida normal. El médico puede recetarles fármacos que prevengan las embolias y otros que impidan su formación. Los accidentes em-bólicos se pueden evitar con ejercicio, adelgazamiento en caso necesario y régimen alimenticio apropiado.

Fuente

U.S. National Heart, Lung, and Blood Institute, Bldg. 31, Rm. 5A52,
31 Center Drive, MSC 2486, Bethesda, MD 20892
Telephone (301)592-8573
Facsimile (301)592-8563
TTY (240)629-3255
http://www.nhlbi.nih.gov/

Trombosis: tratamiento, causas, síntomas, diagnóstico y prevención


10 Oct 2012   | Enfermedades y Trastornos

Se llama trombosis a la formación de un coágulo, denominado a su vez trombo, que obstruye total o parcialmente un vaso sanguíneo, tal como una vena.
Unos instantes después de hacernos un corte en el dedo, las plaquetas de la sangre empiezan a conglomerarse en la herida. Las plaquetas son células sanguíneas con aspecto de disco, incluso mucho más pequeñas que los glóbulos rojos. Las plaquetas reaccionan con el calcio y otras sustancias de los tejidos orgánicos y forman una proteína semisólida filiforme. El corte se cubre de una costra y con el tiempo cicatriza. Para heridas como los cortes, los coágulos sanguíneos son beneficiosos. Pero cuando los coágulos se forman en el interior de los vasos sanguíneos, ello constituye un trastorna que se llama trombosis y puede plantear un peligro para la vida.

¿Cómo se produce la trombosis?

Flebitis Generalmente, la trombosis tiene su origen en la flebitis o inflamación de una o más venas. La flebitis, a su vez, se produce cuando la sangre circula muy lentamente o se acumula en dichas venas. Esto sucede, por lo regular, en las venas de las piernas, y da lugar a lesiones de las paredes de los vasos sanguíneos afectados. Así como las plaquetas acuden al corte del dedo y forman coágulos en él, así también se congregan y pueden formar coágulos en las paredes venosas. Los afectados de flebitis experimentan dolor y sensibilidad a lo largo de la vena, decoloración de la piel, hinchazón y edema, pulso rápido y ligera fiebre. La vena inflamada, si no se trata, puede ocasionar una trombosis.
Causas Las posibles causas son muchas. Una de las principales es el sedentarismo, como cuando se permanece mucho tiempo sentado o reposando en cama. Las intervenciones quirúrgicas, los tumores y las lesiones en las piernas pueden provocar también trombosis. Ciertas
infecciones y cánceres alteran los factores de coagulación de la sangre y pueden causar trombosis.
Las mujeres corren un riesgo especial, ya que la hormona femenina denominada estrógeno tiene algún vínculo con la trombosis. Las mujeres embarazadas presentan concentraciones sumamente elevadas de es-trógeno. Esta hormona forma parte también de los anticonceptivos y de terapias de sustitución del estrógeno que algunas mujeres utilizan después de la menopausia, si bien cabe señalar que no son muy comunes las trombosis debidas a estos medicamentos.

Signos y síntomas

Los síntomas principales de la trombosis son dolor e hinchazón—que pueden aparecer de rápidamente—en la zona afectada. Si la trombosis se produce en una vena de la pierna, es posible que ésta esté enrojecida y se sienta caliente al tacto. Las venas superficiales pueden parecer inflamadas y de color rojo-azulado.
El mayor peligro lo plantean las trombosis de las venas internas de las piernas. Si el coágulo aumenta de tamaño, puede desprenderse, viajar por el torrente sanguineo y pasar por el corazón para alojarse y obstruir la arteria pulmonar, que es una de las principales del organismo, y con ello provocar una embolia pulmonar. De no tratarse rápida y eficazmente, esta grave complicación de la trombosis puede causar la muerte.

Diagnóstico y tratamiento

Los médicos realizan diversos exámenes para determinar si el paciente tiene trombosis. Pueden, por ejemplo, inyectar un colorante (o contraste) en las venas y seguidamente hacer una radiografía, en busca de coágulos. Tal vez usen también una técnica ecográfica, en la que se usan ondas ul-trasonoras para formar una imagen, parecida a la radiográfica, del interior de las venas. O acaso midan la tensión arterial en puntos situados por encima y por debajo de la zona sospechosa del coágulo, a fin de determinar si hay diferencias.
La trombosis se trata con medicamentos que dificultan la coagulación de la sangre, con lo que a veces se impide que el coágulo se haga más grande y se reduce el riesgo de que se desprenda y provoque una embolia. Para ello se inyectan en la vena medicamentos trombolíticos (que disuelven los coágulos). Se emplea también una técnica denominada angioplastia con balón, que ensancha la vena obstruida parcialmente por el coágulo introduciendo e inflando un pequeño globo que dilate las paredes constreñidas de la vena. Otra técnica quirúrgica consiste en la implantación de una prótesis o tubito de malla metálica dentro de la vena para que la mantenga abierta.
Para los que corren un riesgo elevado de trombosis, los médicos recomiendan a veces medidas preventivas como el uso de medicamentos (anticoagulantes) que interfieren en la formación de coágulos y medias
de compresión especiales que contribuyan a impedir la acumulación de la sangre en las venas internas de las piernas.

Fuentes

Venous Educational Institute of North America, c/o Robin Hoyle, Exec.Dir., 900 Cummins Center, No. 221-U, Beverly, MA 01915 Telephone (978)927-8330 http://www.venous-info.com/vein/v01.html